Tu te aventuras, Yo te distraigo

Monday, March 23, 2015

Sociedad y yo.

Estaba cansada, tenia cólicos, mi periodo había empezado, y estaba mi idea clavada en mi cabeza de limpiar mi cueva, así que tome camino y fui al super a llenar mi casa de limpieza y orden, los colicos seguían, Así que rápidamente me dirigí a tomar una canastita chistosa con ruedas, ya que realmente no deseaba un carrito, no necesitaba tanto espacio, anduve por aquí y por haya buscando olores de limpiadores multiusos que me gustaran, esponjas y trapos rosas, por qué me gusta el rosa.
Comencé a sentir los cólicos mas fuertes, me daba coraje conmigo misma si no había cenado ni desayunado, no había razón para sentir tanto malestar.
Quería comprar mariscos, tenía antojo de unos camarones o quizás almejas, pero estaba aturdida con el dolor, estaba insoportable, me odiaba y odiaba al mundo, mis labios fruncidos lo mostraban bastante bien.
decidí mejor no comprar alimento y hacer fila en caja rápida; empecé a sacar mis cosillas de la canastita dije buenas tardes, espere a que se marcara todo y pagar, al punto de recibir el cambio mi vista se estaba nublando y oscureciendo, abrí los ojos como enormes platos y seguia sin mirar y empece a temblar, empecé a sudar y le pedí a no sé quien que me ayudara, que no veía, le suplique que me ayudara.
me sentaron en una banca y yo no entendía nada, yo solo quería limpiar mi cueva con mis trapos rosas y el olor a bebé invadiera mi baño; pero no podía ni mirar, mucho menos pararme.
me llevaron chocolates, refresco y una empanada de mole, decían que se me había bajado mi presión arterial, y yo estaba sola, no tenía a nadie, a la única persona que queria tener, estaba ocupado, así que me aferré a tomar el refresco y mejorar mi estado.
Tuve tanto miedo.

Birdman con delicados

Cada vez que entro a su departamento es como si me transportara a un lugar de el mundo donde solo existieramos el y yo. Es como si se detuviera el mundo y con listones llenos de hedonismo nos envolviera, con calma, con cariño y tranquilidad.
Normalmente pienso que es algo falso, no hay amor, solo deseo y gusto por distraerse un rato de la rutina, otra me descompongo y me vuelvo una masa cursi que lo abraza sin parar buscando una unión permanente de cuerpo, corazón, tripas, huesos, alma.
Mirarlo a los ojos es como si iluminara mi cerebro mi corazón, como si algo brillara dentro de mi, su manera de mirar "me" hace que sienta que realmente soy un ser increiblemente importante para el, cuando arquea sus cejas y me sonríe me siento importante, hasta deleitosa, como si fuera una ninfa corriendo por un lindo jardín aromatizado con infinitas flores de eterna primavera; eso es cuando me mira.
Me besa y siento que absorbemos un poco de nuestra existencia uno al otro, se mezcla y nos volvemos un recuerdo inmortal en nuestras mentes, sus labios son suaves y delgados, su barba pica cada parte de mi cara que roza, mis manos no lo soportan y se envuelven como hilos en un cajoncito de la abuela con sus cabellos queriéndose fundir en ese maravilloso cabello delicado, largo color humo, color ceniza, melancolía, es imposible terminar esos besos sin una sonrisa, pícara, dulce, sincera demostrándole que me siento eternamente tranquila a su lado.
En la oscuridad de su habitación mientras mirábamos la película que fué el principal pretexto para conocernos, lo miraba, mis ojos se pasearon por su frente amplia, blanca y exquisita, limpia y dulce, deliciosa como la leche, me encanta besar su frente, y me derrite besarle la sien; se resbalo por su amplia nariz, y se devolvió a sus ojos, sus enormes y hermosos ojos, el estaba hipnotizado mirando la película, yo estaba idiotizada mirando el ser sin limites que acompañaba con una copa de vino, tabaco y cine.
Toda su composición me parecía hermosa, varonil y dulce, enorme, imponente y caballero; unos minutos después estaba acurrucado en mi pecho lo tenía en mis manos, en mis brazos y sentía que mi espíritu devoraba un poco de su esencia, y la guardaba en lo más profundo de mi pecho, con mi nariz inhalaba su magnifica aroma, y con mis manos le daba un poco de los cariños que tengo para el, como globos enormes eh infinitos de helio, multicolores, hermosos, magníficos, todo para el, lo prometo, solo para el.

No puedo mentirle, no me interesa engañarlo así que le confesé que me había enamorado de el; el me dijo que el empezaba a estarlo también, sentí que mis tripas se empezaron a mover de manera que hicieron una forma de corazón en mi estomago y mi corazón se hinchaba y subió hasta mi cerebro y se apoderó de mi cabeza, estaba euforicamente feliz, así que le dí una fumada a el cigarro y le dije "que pase lo que tenga que pasar".